Aventura: Argentina y la Ruta 40 a bordo de un Fiat 600
Recorrer la Ruta 40 desde el sur al norte de la Argentina es una experiencia única e irrepetible para cualquiera, pero hacerla en un Fiat 600 es algo que solo quien la vive puede relatarla de la manera que lo hacen los “marplatenses” Matías Chamorro y Juan Carlos Alonzo quienes con su “fitito” hicieron la totalidad de la emblemática ruta que recorre la columna vertebral de Argentina. Hoy vienen recorriendo otros puntos de la Argentina y llegaron a La capital Nacional de la Orquídea, donde contaron parte de su historia.
Matías y Juan Carlos, mantuvieron una charla con PORTAL MISIONES, donde contaron parte de lo que representó la odisea de recorrer la Argentina en un “fito” y hacerlo desde el sur al norte, “pasando por todo tipo de caminos y climas”, como relato Matías, quien destacó que todo comenzó como una aventura de dos amigos que decidieron dejar por un tiempo su profesión (ambos se dedican a la construcción) después de juntar algo de dinero y trasladarse primero hasta Ushuaia, donde iniciaron la aventura que duro mas de 50 días y mas de 5000 kilómetros, donde entre otras cosas apuntaron cada lugar de una manera diferente, ya que según destacaron ambos, los paisajes, los lugares, la gente de Argentina en cada zona son únicos y eso lo resaltó Juan Carlos quien valoró fundamentalmente la solidaridad y la admiración por cada uno de esos lugares que visitaron, destacando que en el caso de la extensa ruta 40, cada lugar tiene una belleza diferente pero que si el tenia que elegir “la inmensidad de los paisajes del norte argentino, son únicos”, resaltó, al igual que Matías, quien también fue coincidente con su compañero de ruta.
Ambos destacaron, que el proyecto llevaba varios años y el original era el de recorrer Chile, Perú y Bolivia, pero que por la pandemia del Covid-19, al cerrarse las fronteras les resulto imposible hacerlo y que una vez que se libero para comenzar a recorrer Argentina, proyectaron el viaje que concretaron de sur a norte, donde había días que hacíamos 100 kilómetros, otros hacíamos 500 y había días que apenas recorríamos algunos para quedarnos en algún lugar disfrutando de la gente, los paisajes.
Ante la consulta, los viajeros destacaron a este medio que no tuvieron ningún inconveniente con el “600 que se portó de manera increíble” conto Matías quien a su vez relató que su pasión por el “fitito” comenzó hace unos 10 años cuando su hermana puso en venta el que tenía y el lo compro, poniéndolo en condiciones para estas aventuras -resaltó- contando que este viaje de ahora culmina en las Cataratas del Iguazú y los Saltos del Moconá, después de haber salido de su Mar del plata natal, ir a Rosario, Santa Fe, Santiago del Estero, Formosa, Chaco, Corrientes y Misiones. Uno de los puntos que destacaron los viajeros son los clubes de los fanáticos del 600 que los reciben en todos lados y comparten la experiencia de viajar, en el caso de la ciudad de Montecarlo, fueron recibidos por Miguel Arrua, Renzo Alfonzo, entre otros, integrantes del club del 600 de la Capital Nacional de la Orquídea.
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